El ictus es una enfermedad cerebrovascular que provoca una falta de oxígeno en las células nerviosas de la zona donde se origina. Esta falta de oxígeno ocurre tras la rotura de un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro o existe una coagulación dentro de él.
El ictus puede producirse en diferentes zonas del cerebro lo que hace que se tengan unos síntomas diferentes dependiendo de su localización. Por ejemplo, si la zona afectada es en el cerebelo, se verán afectas las capacidades de equilibrio, memoria, y coordinación, entre otras.
A continuación, se exponen los síntomas de ictus más comunes en función del lugar de afectación:
SÍNTOMAS DE ICTUS MÁS COMUNES EN FUNCIÓN DE SU LUGAR DE AFECTACIÓN
Si el ictus se ha producido en:
La cara frontal del cerebro, puede afectar a la memoria, el comportamiento, las emociones, el movimiento y la inteligencia.
La cara parietal del cerebro, puede influir en el habla, la lectura y comprensión, el pensamiento y cosas abstractas y en la percepción de las cosas.
El lóbulo temporal del cerebro, puede afectar a la vista, el oído y el lenguaje.
El lóbulo occipital del cerebro, la vista se ve afectada.
El cerebelo, aparece una disminución del equilibrio, de los movimientos del cuerpo, de la coordinación y la memoria se ve afectada.
El tronco cerebral, los síntomas son más graves, pudiendo afectar a la respiración, la presión sanguínea y la temperatura corporal.
En la imagen podemos ver cómo se refleja en el cerebro cuando el ictus es ocasionado de manera hemorrágico o de manera isquémico.
CAUSAS MÁS FRECUENTES DE SUFRIR UN ICTUS
Presión arterial alta.
Aneurisma cerebral (dilatación de las arterias) y posible rotura de las mismas.
Arteroesclerosis de las arterias carótidas que llevan la sangre del corazón al cerebro.
Tabaco.
Arterioesclerosis.
Trombos en arterias o vasos sanguíneos.
Arritmia y fibrilación auricular (el ritmo del corazón es irregular). Suele presentarse en personas mayores de 80 años.
Enfermedad de diabetes mellitus.
Rotura de la pared de una arteria.
Herencia familiar.
Consumo de drogas
Virus Covid 19.
CÓMO PODEMOS PREVENIR LA APARICIÓN DE UN ICTUS
No todas las causas que pueden llegar a producir un ictus se pueden evitar pero debemos saber que existen muchas que, llevando un estilo de vida saludable de alimentación y ejercicio físico podemos controlar.
Las neuronas como los músculos de nuestro cuerpo tienen capacidad de activarse mediante los impulsos nerviosos que se producen a través de sustancias químicas. Cuanta más actividad cerebral haya en nuestro cerebro más posibilidades habrá en la creación de nuevas neuronas (neurogénesis) y también en su remodelación de las ya existentes.
Existen estudios que dicen que la mayor fuente de plasticidad de nuestro cerebro conocida como la capacidad del sistema nervioso en modificar a nivel funcional y estructural, está en la remodelación de neuronas ya existentes. Esta remodelación se produce con las estimulación de los circuitos neuronales. Pero cabe destacar, que al igual que puede aumentar la remodelación de las neuronas, esta también puede disminuir con la ausencia de estímulo, por lo tanto es clave una estimulación neuronal para tener un mejor funcionamiento de nuestro cerebro y evitar así el envejecimiento de las células.
En 2017 un neurocirujano español Juan A. Barcia., llevó a cabo un experimento con su equipo donde pudieron evitar la pérdida del habla de un paciente a través de la estimulación eléctrica en un área concreta del cerebro.
El paciente tenía un tumor en el área Broca. Si los cirujanos llegaran a extirpar el tumor, conllevaría la perdida de lenguaje del paciente. Antes de extirpárselo, los neurocirujanos decidieron interferir en el funcionamiento normal de las señales eléctricas a través de la estimulación magnética transdural. Un electrodo era el encargado de enviar señales eléctricas a la zona afectada del cerebro y al hacerlo, directamente el paciente perdía el habla. El cerebro se llegó a acostumbrar a estos impulsos eléctricos y los cirujanos aumentaron la intensidad, lo que conllevaba de nuevo la perdida del habla del paciente.
Después de dos semanas, se vio que otra zona ajena al área broca asumió las funciones del habla. Finalmente los cirujanos extirparon el tumor cerebral consiguiendo que el paciente mantuviera el habla.
Aunque este estudio evidencia la increíble conexión y el funcionamiento que tiene nuestro cerebro en un tumor cerebral, podemos asumir con ello las posibilidades que tiene nuestro cerebro en mejorar las funciones neuronales en un paciente con Ictus o en muchos casos dependiendo de su gravedad, mantenerlas.
Realizar ejercicios de Brain trainning y el aprendizaje ayuda a crear más plasticidad neuronal.
Por otro lado, cabe destacar que con el paso de los años muchos estudios realizados por científicos de neurociencia, han demostrado que estar rodeados de naturaleza es muy beneficioso para la neuroplasticidad cerebral. Se ha visto una liberación del estrés y reducción de la ansiedad al disminuir los niveles de cortisol.
DESDE EL PUNTO DE VISTA MOTOR Y BIOMECÁNICO
Existen estudios que evidencian que la realización de ejercicio y actividad física mejora las conexiones neuronales. Teniendo en cuenta que un movimiento empieza desde el impulso eléctrico de la neurona, al hacer ejercicio estamos mandando continuamente señales al cuerpo desde nuestras neuronas. Esto se produce gracias a la neurona motora.
También la realización de un ejercicio más específico como el ejercicio de fuerza hace que se desarrollen nuevas vías nerviosas. Este ejercicio sumado al ejercicio de propiocepción es una combinación perfecta para conseguir beneficios en la salud de una persona que ha vivido un ictus.
Si el ictus ha afectado el movimiento de la persona, como norma general, se produce una hemiparesia (debilidad y limitación parcial de un lado del cuerpo) que puede afectar a una extremidad o a las dos del mismo lado afectado. Si este es el caso, los ejercicios unilaterales son muy efectivos para sacarle el mayor partido funcional a la extremidad afectada y por tanto a sus músculos.
A continuación expongo una rutina de ejercicios que van a ayudar al aprendizaje de patrones de movimiento modificados tras una parálisis del hemisferio lateral producida por un ictus.
En la sesión de ejercicios se utilizan ejercicios funcionales donde se desarrolla:
1. La fuerza concéntrica y excéntrica
2. Reeducación del movimiento y propiocepción.
3. Ejercicio de marcha descalzo por desequilibrio biomecánico.
Los objetivos de la sesión son:
1. Mejora de la plasticidad cerebral a través de la práctica de una habilidad aprendida.
2. Mejora de la fuerza en extremidad inferior.
3. Activación de los receptores del pie.
READAPTACIÓN DE EJERCICIO FISICO Y MENTAL PARA UNA PERSONA QUE TIENE DESEQUILIBRIO Y DISMINUCIÓN DE LA RESPUESTA MOTORA EN PIERNA DERECHA TRAS UN ICTUS
1. ELEVACIÓN DE LOS DOS TALONES.
Ayudándonos de unas espalderas para sujetarnos, comenzaremos subiendo los talones a la misma vez.
2. ELEVACIÓN DE TALÓN.
Esta vez separaremos los pies dando un paso y comenzaremos subiendo el talón del pie que está detrás.
3. ELEVACIÓN DE TALÓN
En la misma posición comenzaremos bajando la rodilla del pie que está detrás, despegando el talón del suelo.
4. SUBIDA AL STEP
Subiremos al step con la pierna dominante y bajaremos con la pierna no
dominante.
5. ELEVACIÓN DE RODILLA
Subiremos la rodilla flexionada a 90 grados.
6. SENTADILLA
Realizaremos una sentadilla intentando echar el mismo peso en cada pie.
7. LEVANTAR LOS TALONES
Levantar más el talón derecho.
8. ADELANTAR RODILLA
Llevar la rodilla derecha delante de la punta del pie.
9. REALIZAR MARCHA
Realizar la marcha con los pies descalzos para estimular los receptores nerviosos del pie y ser consciente de la propiocepción en el apoyo de la planta del pie.
10. REALIZAR PEDALEO EN BICICLETA
Referencia Bibliográfica:
Benito-Sipos, J. (2021). Redefine imposible. Barcelona: Editorial Planeta, S.A.
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